Marruecos celebra muchos Moussems a lo largo del año, que son fiestas en honor a los santos. En mayo se celebra anualmente el Ben Aïssa Moussem, uno de los festivales más importantes de Marruecos que lleva el nombre de San Ben Aïssa. Ben Aïssa fundó la hermandad sufi Aïssawa en el siglo XV, que alguna vez fue uno de los subcultos sufíes más grandes de Marruecos. Los asistentes al festival viajan a Meknes, donde se encuentra la tumba de Ben Aïssa en las afueras de la ciudad. Hay comida y diversión por todas partes, carreras de caballos y atracciones de feria. Los devotos más extremos de la hermandad sufi Aïssawa se ponen en trance y se someten a pruebas de fuerza y resistencia para demostrar que son verdaderos devotos. ¡Hasta hace poco, uno de estos ensayos incluía tragar vasos! De acuerdo con la Planeta solitario, “Es un festival ajetreado con fantasías (cargas de caballería que disparan mosquetes), pompa medieval (con el telón de fondo de un recinto ferial moderno), ilusionistas y mucho canto y baile”.